viernes, 14 de marzo de 2008

defeca organos

¡Hermano!
¡Has venido a esta página buscando cómo escaparte del pecado, y te ayudaremos!
¡Has renunciado a tantas cosas; te has quitado el mal como se quita un pulover cuando hace calor; como se quita una manzana podrida de una cesta!
¡Has dejado de comer como un cerdo, de fornicar, de beber, de dormir más de lo necesario, de jugar, de irte de vacaciones, de malgastar el dinero, de opinar sobre política, de navegar por internet, de usar la computadora, de ponerte ropa, de mirar televisión, de escuchar radio, de leer novelas, de trabajar, de comprar alimentos, de comprar medicinas, de ir al médico, de enviar a tus hijos a la demoníaca escuela, de salir a la calle...!
¡Las cosas que has expulsado de tu vida, hermano!
Creemos que ya estás preparado para el salto final: debes expulsar de ti los órganos que te inducen al pecado. Échalos afuera, hermano, échalos afuera.
Defeca tu hígado, tu estómago, tu bazo, tus riñones, tus intestinos, tus genitales... Defécalo todo, hermano, en una Santa Diarrea. No olvides defecar el órgano más pecaminoso de todos,: tu propio culo. Si no lo haces, todo lo que hiciste antes dejará de tener valor.
Una vez que defeques tus órganos te sentirás mucho más liviano y etéreo.
Podemos acompañarte gritando ¡Fuerza! y ¡Aleluya!, hermano.

3 buscadores apelaron:

Anónimo dijo...

Sì, etèreo, seguro se va a sentir.

Anónimo dijo...

Activia Strong: Nuevo sabor!!... Y sentíte liviano para siempre... (PARE DE SUFRIRRRR!!!!!)

unServidor dijo...

Defecar el culo dejenlon para el final, eso sí.
XD