trazos geometricos de una teta

¡Ya te lo dije y te lo vuelvo a repetir, Daniela!
Lo mío es estrictamente cien-tí-fi-co.
¿A qué me dedico desde que nos casamos? ¡Exacto! Matemáticas.
¿Cómo que qué tienen que ver las matemáticas con la pasante desnuda sobre el escritorio del aula?, ¿qué tiene que ver?, por favor, Daniela, qué pregunta tan básica.
No, no, no, no te estoy diciendo que vos sos básica, no te confundas... lo básico es la pregunta, además, ¿qué hacés acá en la facultad a esta hora?, ¿no te dije que no vinieras a verme a mi trabajo en horario de clases?
No, no te estoy cambiando de tema... pero insisto: lo mío es rigurosamente científico.
¡Daniela, no dije rigidez, dije rigor, che!
¿Cómo que por qué no te estudio a vos?, ¿vos querés saber qué tiene ella que no tenés vos?
No tengo ningún problema en explicarte.
Aguantame un cachito que voy a hasta la compu, donde tengo los apuntes y te muestro las ecuaciones y las representaciones de las parábolas, elipses, concavidades y otras cosas mucho más aburridas que abundan en ese objeto de estudio cien-tí-fi-co.