porque a los alpinistas les da enema

Como médico, siempre les recuerdo a mis pacientes las virtudes del deporte.
Una vida sin actividades deportivas es la fuente de todos los males.
Por eso, hago una militancia muy específica para que todos practiquen automovilismo, ajedrez o pilotaje de aviones. Esos son deportes de verdad. No como el fútbol, el atletismo, la natación, el alpinismo y cualquiera de esas aberraciones para maniáticos.
Los deportes denominados "aeróbicos", que tonifican los músculos y crean una gran capacidad pulmonar son cansadores y pueden causar lesiones. Además me parece de boludos eso de perseguir pelotas, correr como loco sin objetivo, nadar por el agua como una piraña o subir montañitas.
Por eso yo trato de disuadir a estos "deportistas de la boludez" para que no insistan con esas obsesiones oligofrénicas
Cuando viene a mi consultorio alguien que juega al fútbol, o que sale a correr, lo miro con horror y le mando a hacer urgente una operación de pies y rodillas, a menos que deje de jugar o correr. 

Si viene un nadador, le digo que el agua es peligrosa y que le puede agarrar un paro respiratorio. Si insiste, lo mando a hacer una cirugía cardiovascular.
Y con los alpinistas la cosa es más complicada, porque les advierto que, si desean subir montañas, lo pueden hacer. No hay ningún inconveniente. Eso sí, deben cargar una máquina de hacer enemas y subir (y luego bajar) todo el trayecto con el dispositivo metido en el recto.